A manera de explicación...

Para los ignorantes: Érase una vez -- desde 1892 a 1973, para ser exacto -- un hombre que se llamó John Ronald Reuel Tolkien. En 1937 publicó un libro para niños, El Hobbit, que vendió muchas copias. El cuento toma lugar en un pasado remoto cuando elfos, enanos, y otros seres fabulosos todavía paseaban por la tierra. Tolkien empezó una secuela, pero el cuento explotó y creció hasta ser una novela grandísima que costó más de quince años para escribir. En 1954-55 Tolkien finalmente publicó la famosísima novela de fantasía, la trilogía El señor de los anillos. Después de la muerte de Tolkien, su hijo Christopher editó y publicó una mitología construida, El Silmarillion, a partir de los manuscritos de su padre. Esto dio fondo histórico para los otros dos libros. Juntos, los libros describen un mundo entero imaginado, con geografía, demografía, historia -- e idiomas. Los idiomas son absolutamente imprescindibles. Tolkien era inventor de idiomas desde su juventud. Y muchas veces dijo que inventó a su mundo para el propósito único de crear un sitio donde sus "idiomas élficos" pudieran existir, aunque era esto difícil de creer para otros.

¿Por qué estudiar estos idiomas? En mi ensayo El vicio-no-tan-secreto de Tolkien aquí en este sitio, pongo una variedad de propósitos: "El hecho mismo de que ninguna gramática verdadera del élfico se ha publicado crea un reto fascinante, la de descubrir el código". O puede ser romanticismo puro, una forma especial de imersión literaria: por estudiar los idiomas Eldarin, uno intenta acercarse a -- de hecho, entrar en las mentes de -- los elfos inmortales, bellos y sabios, los Primogénitos de Eru Ilúvatar, maestros del Hombre en su juventud. O, menos romántico, se quiere estudiar las construcciones de un lingüista con talento y el proceso de creación de un genio ocupado en su labor de amor. Y muchos nada más se gozan de los idiomas élficos del mismo modo que se goza de la m&uuacute;sica, como elaborados y (según los gustos de mucha gente) gloriosamente exitosos experimentos en la eufonía. El tono y sabor del mundo de Tolkien se captura y se contiene en sus idiomas. Y de todos modos: ¡no son fingidos! Llamarlos "construídos" y no "naturales" no ayuda mucho, porque todos los idiomas son "construídos". Los idiomas que algunos llaman "naturales" no son nada más que construídos durante muchos siglos por gente que generalmente no era consciente de sus hechos. Aunque los idiomas de Tolkien fueron construídos por un hombre que sin duda sabía lo que hacía, ellos también tienen una historia de cambio y evolución -- incluso en dos dimensiones, las (desafortunadamente numerosas) revisiones hechas por Tolkien durante su vida, y el desarrollo imaginario dentro del mundo inventado. En mi opinión, las construcciones lingüísticas de Tolkien se deben considerar "idiomas simulados".

Aunque se ha estudiado los idiomas de Tolkien con toda seriedad durante décadas, encontré que había relativamente poca información sobre estos idiomas en la red. Lo que existía era generalmente inexperto, incompleto, inexacto, y anticuado, o en un caso -- el de Anthony Appleyard -- muy concentrado y técnico, excelente para los que ya se han enredado en estas cosas, pero probablemente difícil de asimilar para principiantes. Esta falta de información buena en la red es aún más sorprendente cuando se considera que la lista de TolkLang tiene setecientos abonados, ¡más que la lista general para Tolkien! Entonces yo me pongo a hacer un sitio dado a lingüística Tolkieniana. Se intenta aquí extraer la información puramente lingüística de las escrituras publicadas y presentarla en una forma (se espera) fácilmente entendible. Quiero especialmente ayudar a escritores, y proveerles de información puesta al día (y teorías plausibles) acerca del quenya y el sindarin. En el mundo mítico de Tolkien, el quenya era "una lengua antigua de Eldamar...", mientras el sindarin era la lengua vernácula viva de los Elfos Grises en la Tierra Media (SA apéndice F). Estos dos eran siempre los idiomas más importantes del mundo mítico, y son los &uuacute;nicos idiomas bastante completos para poder usarlos (aunque las lagunas en nuestro conocimiento a veces hacen nuestros esfuerzos comparables a los de Ernest Wright, quien escribió un libro entero -- Gadsby -- sin usar la letra e).

Sin embargo, la información que se encuentra aquí no tendrá mucho sentido para la persona que no esté familiarizada con el mundo mítico de Tolkien. Los idiomas de Tolkien y su mundo se conectan íntimamente y son básicamente inseparables. Aquí yo extraigo, analizo, y presento información lingüística desnuda, pero estos ensayos pretenden suplementar y no reemplazar las escrituras de Tolkien -- incluso todos los materiales puestos a nuestra disposición por los muchos años de trabajo esmerado editorial de Christopher Tolkien. De hecho me alegro de dedicarle este sitio a él. Puedo nada más reiterar que la información en este sitio no tendrá mucho sentido si se la quita del contexto y fondo a que pertenece: el "mundo secundario" increíblemente detallado de Tolkien. Esto es meramente un suplemento lingüístico a la escritura de Tolkien, que da información lingüística tanto como la excelente Gu&iaacute;a Completa de la Tierra Media de Robert Foster da información histórica y factual -- ¿pero quién pasaría por alto El señor de los anillos para esta guía? Véase abajo acerca de qué libros los estudiantes de los idiomas de Tolkien deben obtener.

Ahora algunas practicalidades.



[Aquí va información referente al modo de escritura de los artículos originales comparándolos con el inglés de Inglaterra y el de Estados Unidos; esta información no es necesaria en la traducción y por ello se suprime.]



Referencias

También existe el problema de dar referencias a la literatura central: El señor de los anillos y El Silmarillion. (El Hobbit tiene muy poco material lingüístico.) Hay tantas ediciones y traducciones que no puedo simplemente referirme a cierta página. Desafortunadamente las referencias no pueden ser más acertadas que el capítulo o apéndice del qué se trata.

El señor de los anillos, desde ahora SA, típicamente se publica en tres volúmenes. Tolkien nunca pensó en ello como una trilogía, porque los volúmenes 1-3 cuentan una sola historia y no pueden ser leídos independentemente. De todos modos, los volúmenes tienen títulos individuales: La compañía del Anillo, Las Dos Torres y El Retorno del Rey. Simplemente los llamaremos SA1, SA2 y SA3. Cada uno de éstos contiene dos "libros"; I y II en SA1, III y IV en SA2 y V y VI en SA3. Estos "libros", no como los volúmenes, representan la división lógica de la historia. Cada uno tiene sus propios capítulos 1, 2, 3, etc. Así que una referencia como "SA3/VI cp. 5" significa que se debe revisar El Retorno del Rey, encontrar el Libro Seis que está en ese volumen, mirar en el capítulo 5 y empezar a pasar frenéticamente las páginas hasta que encuentres la referencia o pierdas los nervios. Los Apéndices a SA son simplemente citados como Apéndice A, B, etc. En el caso de El Silmarillion, simplemente se refiere al capítulo en cuestión por su número (y a la Ainulindalë, el Valaquenta y la Akallabêth por su nombre).

Por suerte, muchos de los otros libros existen en una única edición solamente, así que se puede dar la página exacta de la referencia. Estas son las abreviaciones usadas:

RGEO: The Road Goes Ever On (Sin traducir)
CI: Los Cuentos Inconclusos
Cartas: Cartas de J.R.R. Tolkien
MC: Los Monstruos y los críticos y Otros Ensayos

y los doce volúmenes de La Historia de la Tierra Media (llamada HTM en conjunto) (en la edición española los tomos 5, 6, 7, y la mitad del 8 se separaron en una segunda colección llamada Historia de El Señor de los Anillos, eso se respeta en la traducción)
CP1: El Libro de los Cuentos Perdidos 1
CP2: El Libro de los Cuentos Perdidos 2
BB: Las Baladas de Beleriand
FTM: La Formación de la Tierra Media
CP: El Camino Perdido
RS: El Retorno de la Sombra
TI: La traición de Isengard
GA: La Guerra del Anillo
SD: Sauron Defeated (Sólo se tradujo la mitad (FTE: El Fin de la Tercera Edad))
MR: Morgoth's Ring (Sin traducir)
WJ: The War of the Jewels (Sin traducir)
PM: The Peoples of the Middle-earth (Sin traducir)

Desde el punto de vista lingüístico, los libros más importantes de HTM son CP y WJ. CP es absolutamente indispensable paral estudiante serio de los idiomas de Tolkien, porque este libro reproduce las imprescindibles Etimologías, nuestra fuente primaria de vocabulario élfico. WJ contiene el ensayo Quendi y Eldar, que trata de los nombres élficos de varias entidades e incidentalmente revela mucha información sobre los idiomas. Estos dos libros deben -- de hecho, tienen que -- estar en la biblioteca de cualquier estudiante serio de élfico.

Los intereses del estudiante determinan otras compras. El que quiera estudiar Ad&ucaron;naic (Númenoreano) debe comprar SD (la parte no traducida). Aquí se ve una descripción extensiva y detallada (aunque nunca terminada) de esta lengua. SD también contiene no pocas inscripciones en tengwar, en inglés, sindarin, e inglés antiguo. El texto más extensivo que se ha publicado en sindarin, la Carta del Rey, también se encuentra en SD. Para el que quiere estudiar oestron, PM da muchas más formas "originales" de los nombres anglicizados por Tolkien que las mencionadas en los apéndices de SA. El que quiere estudiar las formas más tempranas de las lenguas que finalmente llegaron a ser el quenya y el sindarin (sc. "qenya" y "gnómico") debe obtener los dos volúmenes CP1 y CP2, donde Christopher Tolkien cita muchas palabras y formas de los primeros léxicos hechos por su padre más o menos por el año 1915.

Fuera de HTM, los libros más interesantes son Los monstruos y los críticos, The Road Goes Ever On y Las cartas de JRR Tolkien. MC contiene el ensayo de Tolkien Un Vicio Secreto), con los pensamientos y teorías de Tolkien sobre la creación de idiomas -- uno de ellos con una traducción a quenya maduro, dándonos una oportunidad única para comparar directamente las dos versiones. RGEO contiene caligrafía tengwar de los poemas Namarie y A Elbereth Gilthoniel además de traducciones interlineales de ellos, seguidas de los apuntes de Tolkien. Mucha informacián de valor tambié ocurre en varias partes de Cartas; por ejemplo, las cartas 211, 297, y 347.

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